sábado, 31 de diciembre de 2016

Las gafas de Supermán

Superman (1934)

Superman fue una criatura salida de las mentes de Jerry Siegel y Joseph Shuster, dos adolescentes de Cleeveland que soñaban con grandes ganancias  a través de la creación de una tira de aventuras popular para periódico .Combinando  los personajes de dos de los personajes de Edgar Rice Burroughs, Tarzán y Jhon Carter de Marte, Siegel y Shuster revolucionaron con su personajes la historia de historias convencionales de la ciencia ficción. En lugar de un habitante de la Tierra viajando a un extraño y nuevo planeta ( como en las historias por Flash Gordon o Buck Rogers) , es un ciudadano de un mundo distante con poderes extraordinarios el que llega a nuestro planeta. Esta innovación, junto con el uniforme lleno de colorido (inspirado ,quizá, por la vestimenta de los forzudos que actuaban en los circos de la época), y en la entonces relativamente novedosa identidad de la identidad secreta para el heroico aventurero , hicieron su tira insólita por lo original. 

En su concepción original y como fue presentado en sus primeras historias, los poderes de Superman eran relativamente limitados, consistiendo en fuerza sobrehumana capaz de levantar un auto sobre su cabeza, correr a velocidades increíbles y saltar una distancia de cuatrocientos metros en un salto, así como una piel muy dura que no puede ser atravesado por nada o algo más débil que la explosión de un proyectil de artillería. Sus creadores Siegel y Shuster compararon esta fuerza y habilidades de salto con las de una hormiga y un saltamontes. 

A finales de los años 40 esos poderes limitados se ampliaron incluyendo vuelo, superfuerza, invulnerabilidad, supervelocidad, poderes de visión (rayos x, calorífica, telescópica, infrarroja, y microscópica), superoído, y superaliento, el cual le permite soplar a temperaturas congelantes así como ejercer la fuerza de un viento huracanado. 


Pero existía un gran misterio. ¿Cómo nadie se da cuenta de que Superman y Clark Kent son la misma persona. ¿A quién puede engañar ese disfraz tan burdo? ¿Unas gafas? No cabe duda de que  las gafas de Superman es uno de  los disfraces más ridículos e ineficaces de la historia. 

Para ello se añadió un nuevo superpoder: el superhipnotismo, que en el número 330 de Superman se explica diciendo que mediante esas gafas hechas de un cristal kryptoniano, hipnotizaba de forma aparentemente subconsciente a todos aquellos que lo veían para hacerles creer que su cara era completamente distinta de la de Clark Kent, haciéndoles creer que se trataba de dos personas distintas.

Fuente: La física de los superhéroes- James Kakalios- Ediciones Robinbook 

martes, 27 de diciembre de 2016

El cine de suecas y machos celtíberos


El origen
Estaba España sumergida en la más pura miseria tanto económica como política ,a punto del colapso y la ruina y abocada al desastre en todos los frentes, cuando  a partir de los años 50 unos personajes extraños a la ideología oficial ,política y religiosa,  llamados turistas , salvan a Franco y su régimen en su momento más delicado. Entrarán la temidas “ideas perniciosas” pero también el maná de las divisas. Una cosa por otra. 
España empieza a abandonar el arado por el ladrillo, y ya no mira a las alturas buscando la salvación del cielo eterno, sino que alza sus ojos para ver las enormes torres que se hincan frente a las playas de nuestro mar. Como si el dique se hubiera roto, y las conciencias hubieran cambiado (a golpe de billetes, claro) miles de turistas empiezan a abarrotar nuestras costas y nuestras ciudades más señeras. La península, en sus zonas costeras para ser exactos,  cambia al paso de los bikinis , prenda de baño hasta entonces anatemizada por los vigilantes de las buenas costumbres, que comienzan a inundar las playas, motivando la entrada de nuevas ideas y nuevas formas de vida desconocidas por los españoles. 
Elke Sommer en Bahía de Palma
El primer bikini del cine español
El primer bikini cinematográfico que tiene el honor de ser autorizado por la censura ,se vio en España irrumpiendo en el imaginario erótico del españolito medio en 1962, en la película Bahía de Palma, lucido por la actriz alemana Elke-SommerPor supuesto tan excitante prenda de “vestir”,en una película española, no podía llevarla una actriz nativa.
Sinopsis
Mario comienza a trabajar como pianista en una sala de fiestas en Palma de Mallorca, donde se encuentra con dos mujeres, una antigua alumna, y Clara, quien conseguirá conquistarle... (FILMAFFINITY)
Carteles promocionales de Bahía de Palma (1963)
Los carteles de promoción en los que Elke Sommer aparecía en bikini llegaron a ser pintados sobre la fotografía por los censores hasta convertir el dos piezas en un traje de baño, y en algunas ciudades, como Sevilla, fueron más allá, transformando el bikini en un vestido. Las autoridades eclesiásticas llegaron a considerar la película gravemente peligrosa y desaconsejable para todos los públicos, lo que motivó que la Guardia Civil se apostara a la puerta del cine para controlar rigurosamente la edad de los espectadores. Las críticas de la época arremetieron contra la indumentaria estival de la cinta.

 El macho celtíbero y las suecas

Las suecas
Las costumbres empiezan a transformarse rápidamente y cientos de jóvenes enfilan rumbo a las zonas exteriores del país buscando trabajo y también intimar con las jóvenes y guapas rubias venidas allende los mares, conocidas como “las suecas”. Por aquel entonces "las suecas" eran todas las extranjeras, de Suecia o de cualquier otro sitio, que llegaban a España con sus minifaldas y sus piernas al aire, y que además ¡¡bebían y fumaban!!. Tomaban el sol en bikini haciendo que a más de uno se le revolucionaran las hormonas, y normalmente se hacía la vista gorda ante estos casos de "provocación" y de "falta de decoro" , porque, en definitiva, el turismo procedente de Europa proporcionaba pingües beneficios a un país en el que no sobraba nada. 
De este modo se crea el mito del macho celtíbero y el de la fácil extranjera que busca ávidamente aventuras veraniegas. Los jóvenes españoles ante tanto ayuno eclesiástico y tan frecuente represión sexual comienzan a experimentar nuevas sensaciones ante muchachas tan robustas, tan alegres y tan desinhibidas que producen el efecto mágico de despertar las conciencias de unos oriundos tan sumergidos en ideas reaccionarias que parecía imposible que despertaran de ellas.  
España se vio llena de mujeres que bebían, fumaban y enseñaban los muslos y el escote.
Las suecas fueron nuestro despertar a Europa. Tuvieron que aguantar muchas burradas, porque los hombres de la época no sabíamos comportarnos: las playas pronto se llenaron de tíos bajitos y morenos como yo que trataban de ligar con esas señoras tan macizas. En cuanto veíamos un poco de muslo, nos volvíamos locos
100 españoles y el sexo- David Barba -Editorial Plaza y Janés-Entrevista a Alfredo Landa


La noción de mundo comienza a cambiar para los españoles, mientras, por contrapartida, una buena cantidad de beatas a ultranza claman a los cielos buscando el rayo fatídico que destruya a tanta sueca y tanta falta de respeto. 

En la costa catalana, las beatas de Acción Católica apedreaban a las turistas que paseaban con pantalón corto, se mesaban los cabellos, se sacudían golpes de pecho y se rasgaban las vestiduras ante tamaña demostración del poder infernal, pues el demonio andaba a la caza y captura de incautos en la Tierra y había que luchar para que no se hiciera con su botín: el mayor número posible de almas. Lo que nunca se imaginó nadie es que quizás los españoles querían ser poseídos
Las amadas ovejitas del Señor
(…) esos indeseables, con su indecoroso proceder en las playas , bares y vías públicas y, más aún con sus hábitos viciosos y escandalosos van creando aquí un ambiente maléfico que nos asfixia y que no puede por menos que pervertir y corromper a nuestra inexperta juventud… Nadie se explica por qué se autoriza aquí la estancia de féminas extranjeras, corrompidas, corruptoras que sin cartilla ni reconocimiento médico , viene para ser lazo de perdición física y moral e nuestra inexperta juventud; ni tampoco sabe nadie cómo pueden tolerarse ciertos individuos, carentes de medios de vida ,de los cuales dice la voz pública que viven exclusivamente del vicio que facilitan y propagan descaradamente…
(…) Y que nadie vea en estas líneas otra cosa más que la voz de alerta , el grito de ¡socorro! Del pastor de almas que contempla angustiado e impotente la riza, el destrozo que hace el lobo entre las amadas ovejitas que el Señor le confiara y de las cuales tendré que rendirle cuentas algún día.
Fray Antonio- Obispo de Ibiza
 Paco Martínez Soria y las suecas

El macho celtíbero
En el pueblo español, la afluencia turística representó la culminación entre el centro y la periferia , y muchos lugares de España se despoblaron ante el fenómeno provocado por el turismo. En la costa estaba el jornal seguro, en la construcción, en los servicios, en los oficios a que daba lugar aquella masiva llegada de gentes de fuera, y por si ello fuera poco , además estaban “las suecas”. Muchos empleados, camareros sobretodo, se convirtieron en verdaderos profesionales cuyo nombre y hazañas eran conocidos en el extranjero, no faltándoles nunca clientela atraída por su renombre de macho en perpetua disponibilidad.
El macho celtibérico , a la llamada del estío emigra de las mesetas y demás enclaves áridos y despoblados en busca de esa periferia costera y soleada donde está aguardándoles un importante papel en el concierto turístico…El joven celtibérico espera la llegad del verano y con él la invasión de beldades exóticas, como oportunidad que se le brinda para estar a la altura de su renombre y demostrar que en la oleada erótica que nos invade, en tolerancia justificada por nuestra balanza de pagos, nuestro país ha dejado atrás el subdesarrollo.
El joven varón hispánico , ya sea estudiante, pescador u obrero cualificado, porque en esto no hay distingos ni de clase ni de categoría profesional, reacciona ante la turbadora presencia de la extranjera con instinto y tino de cazador. Por la mañana, en la playa, se dedica al ojeo, escrutando entre un bosque de esbelteces disponibles. Por la noche , elegida ya la pieza, aparece por las discotecas y demás centros de contoneo organizado, dispuesto a acreditar esas cualidades de hombre fogoso que a los meridionales, ha dado justa fama en la estimativa racial.
Cuadernos para el Diálogo- Rafael Abella
 Tres suecas para tres Rodríguez (1975)
 Sinopsis
Cuando Adela (Florinda Chico) se queda embarazada, el médico le recomienda descansar y pasar las vacaciones en la playa. Su marido (Tony Leblanc) se queda entonces de Rodríguez al igual que dos compañeros de oficina. Los tres infelices se dejan enredar por Ingrid, Erika y Elga, tres suecas monumentales que fingen estar enamoradas de ellos, pero, en realidad, sólo los utilizan como tapadera del tráfico de drogas al que se dedican. (FILMAFFINITY)

El cine del macho celtíbero 
Otra consecuencia del turismo fue el cine de machos celtíberos, aventuras costeras del españolito de pelo en pecho en las que se lanzaba a la caza de la sueca, fantaseaba con la posibilidad de ligársela y dejar atrás su aburrido matrimonio... y que al final se acababa estrellando contra la realidad . 
Este personaje , es protagonista de infinidad de películas en las  que entre destapes, equívocos y moraleja final , se da un visión certera de la realidad y la fantasía social de la época, y en las que las costas se convierten en el medio natural para que el ciudadano de a pie deje a un lado sus problemas diarios y se lance a la conquista de unas mujeres (consideradas) fáciles. 
A principios de los sesenta, el entonces ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga, tuvo la idea de impulsar una serie de cintas de temática playera que vendieran el mayor patrimonio de la costa española: el sol y la playa. Y qué mejor que ese ambiente en el que los deseos campan a sus anchas espoleados por la exhibición de los cuerpos para el cine de machos hispanos. La manera de desenvolverse de esos  personajes no es más que un grito de rebeldía ante los años de represión e infantilismo, ante una Iglesia castradora y una educación basada en la imposición del decoro.

Si en 1947, los españoles antepusieron el visionado de Gilda a la salvación de su alma, advertidos de la perversidad del film en todo tipo de sermones eclesiásticos, no es distinta la situación expuesta por los cineastas en las películas de machos celtíberos. Hay una consciente desvinculación de las imposiciones morales para dar rienda suelta a una conducta rijosa y desesperada; una necesaria liberación de los instintos constreñidos durante décadas por el nacionalcatolicismo y que, ahora, ven la oportunidad de verse realizados, aunque ello suponga ir contra las normas establecidas e, incluso, contra los mismos preceptos ideológicos. 
Manolo la nuit (1973)
Sinopsis
Manolo trabaja en la Costa del Sol, divirtiéndose y ligando con las extranjeras que veranean allí. Mientras tanto, su mujer se encuentra en Madrid presa del aburrimiento y los celos. Influenciada por su despiadada hermana, simulará un embarazo con otro hombre para darle una lección. (FILMAFFINITY)

Pero las conductas histriónicas del macho celtíbero son siempre el preámbulo del fracaso. La materialización simbólica de un país todavía en construcción, lleno de dudas, frustraciones y atrasos que no sabe cómo reaccionar ante su deseada apertura europeísta después de décadas del “Santiago y cierra España”. Por consiguiente, las peripecias de estos personajes acaban convirtiéndose en agrios choques ante la realidad circundante.

En realidad los escarceos con las esculturales extranjeras no son más que lamentables malentendidos, y se vuelven, arrepentidos, al hogar conyugal con la esperanza de ser perdonados por sus respectivas esposas. Es la amargura de la destrucción de los deseos lo que se impone en ambos casos.

Y es que como en casa, y con la decente mujer de toda la vida, en ningún sitio. 



Fuentes: La vida cotidiana en la España de Franco- Rafael Abella-Editorial Argós Vergara / La invasión de las suecas -Gabriel Cardona y Juan Carlos Losada -Editorial Ariel/ http://www.miradas.net

viernes, 23 de diciembre de 2016

El malvado Fu-Manchú


A mediados del siglo XIX, se produjo un éxodo masivo procedente de China que se asentó en la costa oeste de los EEUU ,  debido en gran medida a un rumor muy extendido que hablaba sobre la "montaña de oro" de California, aludiendo al descubrimiento de un gran número de minas de oro que se dio en 1849 en aquel territorio,motivo al que habría que sumarle  las grandes  hambrunas que sufrían provincias chinas como la de Guangdong. Ello explica que un porcentaje considerable de la población china se embarcara hacia el continente americano albergando la esperanza de cosechar una considerable fortuna para volver años después a su país de origen.

La realidad que encontraron en tierras americanas fue muy distinta a la que esperaban: lejos de enriquecerse, se toparon ante una tesitura desfavorable que les empujó a renunciar a sus pretensiones y les obligó a luchar por la supervivencia. Se vieron forzados a trabajar en las minas y en la construcción de la líneas de ferrocarril en unas deplorables condiciones laborales, a cambio de un salario irrisorio. A causa del bajo coste de la mano de obra china, la contratación de ésta se fue imponiendo a la del hombre blanco, que comenzó a percibir a los asiáticos como un fuerte competidor económico que reducía perniciosamente la oferta de trabajo. Factores como éste, junto con la frágil situación económica del momento, y cierta insatisfacción social, acrecentaron un sentimiento xenófobo antichino cargado de violencia .

Las alternativas de los obreros chinos ante una situación tan hostil no fueron muchas: unos regresarían de manera permanente a China; los que no disponían de medios necesarios, o a los que la vergüenza les impedía llevar a cabo su vuelta, se verían forzados a huir hacia los Chinatown localizados en la costa. Este tipo de guetos ofrecían a los chinos una manutención y una protección de la que carecían fuera de ellos, pero  el guarecerse en una comunidad totalmente aislada de la sociedad, y de las normas que la rigen, supuso la consolidación de la exclusión del grupo étnico, lo cual terminó por imposibilitar la interacción y el intercambio entre culturas, impidiendo así que el grupo minoritario tuviese opciones de asimilar la cultura predominante.


La coyuntura social en la que se encontraba la comunidad china fue empleada en su contra, acusándolos de inadaptados y culpándolos de su propia marginación, a lo que se añadió como elemento difamador, hecho que se atribuía a un salvajismo y depravación en el individuo de ascendencia china y por extensión a los asiáticos, la existencia , controlados por las mafias chinas y locales, de gran gran cantidad de fumaderos de opio, casas de juego y prostíbulos , estos últimos derivados de una población casi exclusivamente masculina, ya que en general las mujeres chinas no los acompañaron debido a su estatus dentro de la sociedad china. Según el censo de 1870, el 61% de las 3536 mujeres chinas que vivían en California trabajaban en la prostitución forzada. Muchas eran de familias muy pobres quienes las vendían, engañadas con la promesa de un matrimonio en Estados Unidos, y que al bajar de los barcos, eran vendidas en subastas al aire libre en los muelles de San Francisco, a plena vista de la policía, viviendo como esclavas en pequeños cuartitos.

Esta conducta discriminatoria fundada en estereotipos negativos que el americano proyectaba hacia el chino y el resto de etnias asiáticas -entre las que no encontraba diferencia alguna- durante todo el periodo de la fiebre del oro, generó un fuerte racismo que situaba al oriental en un plano inferior en relación al hombre blanco este racismo infundado situaba a los chinos en el punto de mira de la sociedad, que imponía a éstos el papel de chivo expiatorio, acusándoles de ser los responsables de todos los males y carencias sociales, y a los que los americanos bautizaron como el peligro amarillo.

Todos estos estereotipos propagados por el periodismo sensacionalista tuvieron su reflejo en la literatura popular americana de la época, publicándose durante la década de 1880 las primeras novelas que representaban a los chinos como nuevos hunos o ejército de Gengis Kan que bajo el mando de villanos “amarillos” hasta invadían a los Estados Unidos.


A esa mala imagen se añadió además la transmitida por las potencias occidentales a raíz de las guerras del opio y de la rebelión de los boxers, cuyos motivos y consecuencias para el pueblo chino se encargó de ocultar y falsear la propaganda colonialista. Basada en la históricas rebelión de los bóxers , y dando una visión occidental falsa de la misma,Hollywood rodó la película 55 días en Pekin protagonizada entre otros por Charlton Heston , Ava Gardner y David Niven .Tan falsa como la historia era la localización, rodándose la película en las Rozas de Madrid, con decorados del Pekín imperial construidos con la ayuda de artistas falleros y rebeldes bóxers reclutados en las lavanderías y los restaurantes chinos de toda Europa.

 Arthur Sarsfield Ward

El origen de Fu-Manchú

Aunque no es el primero de los personajes ficticios representativos del peligro amarillo, el más popular e importante se debe a Arthur Sarsfield Ward Ward (1883 ¬1959) que bajo el seudónimo de Sax Rohmer creó a un villano de rostro alargado, amarillento y de gesto cruel, vestido con anacrónicos ropajes de mandarín, representando el tópico más temible de lo oriental y al que llamó Fu-Manchú, y que protagoniza una serie detectivesca de 13 historias cortas de espionaje y de misterio escritas por Rhomer entre 1913 y 1959 , deudora del folletín de aventuras del siglo XIX, donde las trampas, la acción y los escapes imposibles priman sobre la caracterización, a lo que hay que sumar la atmósfera misteriosa y exótica de la vida extraña en el aparentemente  plácido Londres.

Imagínate una figura clásica de mandarín chino; un hombre de alta estatura; delgado, de miembros recios, felino en sus actitudes y movimientos, con un entrecejo como el de Shakespeare y un rostro de expresión verdaderamente satánica. De su cráneo afeitado pende la coleta tradicional de los hijos del «Imperio Celeste». Sus ojos tienen el fulgor magnético de los ojos de la pantera.
El demonio amarillo, capítulo II. Sax Rohmer, 1935
El perverso Fu-Manchú, a diferencia de los villanos occidentales, no encarna el mal en una dimensión individual, pues no es un psicópata al uso. antes al contrario, dispone de un tupido entramado de seguidores capaces de entregar su vida por él, definiendo una sociedad secreta china con fines criminales, constituyendo una fantasía inspirada en las tríadas, las confraternidades que desde hace siglos organizan el mundo delictivo chino.

Los personajes


El Doctor Fu-Manchú : Personaliza  el peligro amarillo. Es un sujeto alto, espigado y felino, de espalda ancha,con unas cejas como las de Shakespeare y la cara de Satán, cabeza totalmente rapada y ojos alargados, verdes y magnéticos como los de un gato. Es abyecto y temible y posee además la más desalmada sagacidad de una raza oriental entera condensada en una colosal inteligencia, con la totalidad de los medios de la ciencia, pasada y actual; con todos los medios, si desea, de un poderoso gobierno que, no obstante, ha negado saber nada de él. 

Aparece dotado de medios económicos prácticamente ilimitados y gran cantidad de esbirros, ninjas y otros guerreros y sectas orientales a su mando; gran genio del mal con amplios conocimientos de venenos (usa frecuentemente animales mortales tales como serpientes, arañas y escorpiones), es capaz de idear complicados aparatos modernos (de inicios del siglo XX) para intentar destruir la civilización occidental: ondas de radio, potentes explosivos y otros.

Fu- Manchú habla perfectamente todos los idiomas conocidos, y es un reconocido erudito y genio en todos los campos de la ciencia (incluso en algunos tan oscuros como la alquimia). experimenta con drogas y elixires, que pueden provocar catalepsias y comas, o que pueden alargar indefinidamente la vida. Experimenta con los genes, creando de la nada seres espantosos, clones primitivos que él llama “homúnculos”, o alterando la naturaleza de las plantas y los animales, creando monstruosos híbridos, la mayoría de ellos letales.

No es meramente un científico loco: es un intelectual superdotado. no es un asesino desalmado y sin escrúpulos: tiene su propio código de honor que respeta incluso cuando tiene a su merced a sus oponentes. no es un megalómano nihilista que quiere dominar el mundo: forma parte de una organización política y sus fines últimos son ideológicos. y sobre todo, tiene esa ubicuidad que lo hace omnipresente incluso cuando no tiene que ver directamente con la acción.

El perverso Fu-Manchú, a diferencia de los villanos occidentales, no encarna el mal en una dimensión individual, pues no es un psicópata al uso. antes al contrario, dispone de un tupido entramado de seguidores capaces de entregar su vida por él, definiendo una sociedad secreta china con fines criminales, constituyendo una fantasía inspirada en las tríadas, las confraternidades que desde hace siglos organizan el mundo delictivo chino.

Fah-lo-sue: es la hija del doctor Fu-Manchú. Ha heredado su sangre fría, sus pocos escrúpulos, sus ojos verde jade (algo desconcertante en un asiático), y gran parte de su inteligencia. no siente una especial lealtad hacia su padre, a quien no duda en perjudicar si cree que merece la pena. siempre a la sombra de su padre, esta hermosa y peligrosa mujer, espera su oportunidad.

Sir Dennis Nayland Smith: es una especie de Sherlock Holmes, que en ocasiones resulta grosero y desagradable: la importancia de su misión es tan grande, y le obsesiona tanto, que no tiene tiempo de ser educado con la gente. De aspecto descuidado, alto y fibroso, de piel curtida por el sol de los trópicos, Smith desprende y transmite una energía que parece no agotarse nunca. Fu-Manchú y él son viejos conocidos: se temen y respetan, y ninguno parará hasta que haya destruido al otro. Nayland tiene una pipa -una cachimba-, maltratada por las cerillas, y que se le apaga cada dos por tres. Conoce las tradiciones de oriente y siempre intenta anticiparse a los planes de Fu-Manchú. Cuando piensa, se pellizca distraído el lóbulo de la oreja.


Doctor Petrie: al igual que Watson, Petrie no es demasiado inteligente ,de hecho, su estupidez es en ocasiones motivo de risa-, pero es un buen hombre, de firme voluntad y corazón de oro. Su principal virtud: tiene una suerte prodigiosa, antinatural, lo cual, unido por la simpatía que Fu-Manchú siente hacia él, le convierte en alguien que siempre se salva de las garras de la muerte. Petrie se enamoraría de una bellísima sirvienta de Fu-Manchú: Karamaneh, con la que se casaría en un período de tiempo que transcurriría entre la tercera y la cuarta novela.

Karamaneh: su nombre significa “la esclava”. Pese a trabajar para el malvado doctor oriental, Karamaneh se enamora de Petrie y procura ayudarle siempre, aun a costa de traicionar a su amo. Al final conseguiría librarse de su cautiverio (y el de su hermano, también rehén de Fu-Manchú), y se casa con Petrie, dándole una hija (en la que Fu-Manchú se fijaría especialmente).

Inspector jefe Weymouth: no compite con Nayland Smith, sino que se pone a sus órdenes ,fiel y obediente. No es ningún genio, pero tampoco es un inepto. Sale bastante, no sólo en las novelas ambientadas en Inglaterra sino también en las ambientadas en Egipto.

Sir Lionel Barton: reputado arqueólogo e investigador, es un hombre excéntrico que, sin desearlo, atrae constantemente la atención del doctor Fu-Manchú. Tiene la mala costumbre de cruzarse, en el curso de sus estudios, en el camino del doctor chino, y su vida ha corrido peligro en numerosas ocasiones, llegando a quedar en coma, prisionero, cataléptico…


Shan Greville: es el típico jovenzuelo aventurero cursi de los años treinta. No es demasiado listo, pero, al igual que Petrie tiene una suerte increíble. La hija de Fu-Manchú está loca por él, pero él sólo tiene ojos para Rima, la sobrina de sir Lionel Barton.



Rima Barton: sobrina de sir Lionel, y fotógrafa de sus expediciones, era el modelo típico de heroína de los años treinta. posee una cierta intuición especial que se manifiesta con premoniciones y “yuyus” que le dan cuando va a ocurrir algo malo. Al final de la novela “La máscara de Fu-Manchú” se casa con Shan Greville, recibe una afectuosa y deportiva felicitación de Fu-Manchú, y desaparece de escena junto con su marido.

Alan Sterling: este sano muchachote de ascendencia escocesa, nació en el medio oeste norteamericano. Pese a ser un botánico especialista en orquídeas, no es un ratón de biblioteca, sino que recorre las selvas de medio mundo exponiéndose a toda clase de peligros en nombre de la ciencia. En un viaje al Amazonas, contrae la fiebre amarilla, y es llevado a la costa francesa a pasar su convalecencia, concretamente a la villa del doctor Petrie. Protagoniza, casi en exclusiva, "la novia de Fu-Manchú". 

Fleurette: mujer de los sueños de Alan Sterling, es una criatura extraña y misteriosa, unida por una inquebrantable lealtad a su tutor Madhi-Bey, que en realidad es Fu- Manchú.

Si-Fan : organización con fines altruistas, dedicada a proteger a las gentes de china, de oriente en general, de las agresiones y las ansias expansionistas de los extranjeros.


Fu- Manchú en el cine

Tal fue su éxito editorial en los pulp-magazines (revistas de novela popular), que el personaje Fu-Manchú pronto pasó a las pantallas cinematográficas, que,  curiosamente nunca fue interpretado por un asiático.


De izquierda a derecha . y de arriba a abajo: H. Agar Lyons, Warner Oland, Boris Karloff, Henry Brandon, David T. Bamberg, John Carradine, Glen Gordon, Victor Sen Yung, Christopher Lee, Wilson Grey, Paul Naschy, Nicolas Cage, Xavier Gouault y Michael McQuary


Harry Agar Lyons

La primera adaptación oficial al cine fue en el serial británico de 15 episodios " El misterio del dr. Fu-Manchú (1923), con Harry Agar Lyons interpretando al villano, al que siguió " Los misterios adicionales del dr. Fu- Manchú (1924). Previamente, el personaje había tenido dos apariciones cinematográficas apócrifas, como "Dr. Wu Chung Foo" en el serial mudo "El misterioso Wu Chung Foo" (1914) y como Mr. King en el largometraje sonoro "The yellow claw" (1921).


Warner Olan

Poco después la serie continuó en EEUU con " La expiación del doctor Fu- Manchú"(1929) con el sueco Warner Oland interpretando al doctor, repitiendo papel en " El retorno del doctor Fu Manchú" (1930) y "La hija del dragón" (1931).

Boris Karlof  - La máscara de Fu-Manchú

Boris Karloff

Será " La máscara de Fu- Manchú" (1932) la que le otorgue mayor popularidad al personaje. La aparición de Boris Karloff en el papel protagonista, tras el éxito cosechado en“Frankenstein” (1931), supuso el relanzamiento definitivo a la fama del personaje de Rohmer en la gran pantalla. Pero al contrario de lo que pudiera parecer, este largometraje no sirvió para promover más secuelas del personaje, sino para catapultarlo al estrellato a través de un serial de 15 episodios que sumaban un total de 269 minutos de duración, titulado " Tambores de fu manchú"(1940), interpretado por Henry Brandon, y que sería retomado en forma de largometraje con el mismo título en 1943.

La máscara de Fu-Manchú (1932)

"La máscara de Fu-Manchú" (1932) con Boris Karloff y Myrna Loy, realizada antes del código Hays, se benefició de mostrar sadismo y erotismo en un grado poco después desterrado por Hollywood, y era fiel al original literario. Su estreno causó indignación en el gobierno chino, y su reposición en 1972 fue objeto de protesta entre los ciudadanos asiático americanos. al considerarlo racista y ofensivo y  por sus escenas de tortura, lo cual provocó que se exhibiera en una versión censurada durante muchos años.



Fu- Manchú volvió en forma de serial de 15 episodios con "Los tambores de Fu- Manchú" (  Drums of Fu Manchú ) -1940, que fue posteriormente editado en forma de largometraje en 1943.


Christopher Lee

En 1965, el productor británico Harry Alan retomó el personaje poniéndole esta vez el rostro más conocido de cuantos han interpretado a Fu Manchú: Christopher Lee, que protagonizaría en cinco ocasiones al Dr. Fu-Manchú, inaugurando esta etapa con " El regreso de Fu -Manchú (1965), "Las novias de  Fu -Manchú" (1966) , "La venganza de  Fu -Manchú" (1967).



Bajo la dirección de Jesús Franco, protagonizó "Fu -Manchú y el beso de la muerte" (1968) y "El castillo de Fu -Manchú" (1969). Esta última película presenta la curiosidad de que gran parte de la misma se desarrolla en el Parc Güell y La Ciudadaela de Barcelona , y no en "Estambul y alrededores " como se indica en los créditos de la película.


Paul Naschy

Otro director español, el también actor Paul Naschy (Jacinto Molina) recuperó a e Fu -Manchú en " El aullido del diablo" (1988),película planteada como un homenaje a todos los villanos y monstruos clásicos del cine de terror, y poco después, interpretó " La hija de Fu -Manchú  (1990) en donde se ofrece una parodia del mismo personaje.



Fu -Manchús singulares


Peter Sellers

Peters Sellers en la película " El diabólico plan del Dr. Fu-Manchú (1988), comedia paródica británico-norteamericana, en la que asume el doble papel de e Fu -Manchú y Nayland Smith.
Sinopsis
En su 168 cumpleaños, Fu-Manchú busca la manera de alcanzar la eterna juventud en el mundo contemporáneo. para ello necesita un valioso diamante que será robado por su poderosa red criminal. aunque como era de esperar, Nayland Smith tratará de detenerlo por enésima vez.

Este film supuso la despedida cinematográfica de Peter Sellers, el cual falleció ese mismo año, y cuya enfermedad provocó que no pudiese rendir plenamente en su interpretación cómica y necesitase dobles en muchas escenas. Por todo ello el resultado artístico es bastante mediocre y los elementos de comedia no terminan de funcionar.


Nicolas Cage

Nicolas Cage como el Doctor e Fu -Manchú, en el falso trailer de " Mujeres lobo de las SS" que acompañaba a la película doble " Grindhouse (1970), que parodia las exploitation nazis de los 70.
Sinopsis
Mientras la II Guerra Mundial azota Europa, en el campo de prisioneros número 13 se está llevando a cabo el diabólico plan de Hitler para crear una raza de supermujeres: las mujeres-lobo de las SS.


El tebeo de aventuras español sobre Fu -Manchú

Serie dibujada en 1943 (?) por José Grau Hernández bajo el título "Los tambores de Fu Manchú".

Fuentes: Árboles muertos y mucha tinta - Especial peligro amarillo -nº 0 marzo 2011 / 2000 maniacos nº 43 invierno 2012 / http://anaarandavasserot.wordpress.com// http://www.tebeosfera.com / http://www.laclaqueta.es /http:/www.mcnarte.com// http://quefuede.lacoctelera.net

domingo, 18 de diciembre de 2016

Leyendas de La Codorniz

EL MUNDO ROJO AL REVÉS
MILICIANA: Vengo a decirle que hoy no piuedo venir a la guerra porque mi marido ha tenido un niño....
Portada de julio de 1937

La Codorniz subtitulada en 1951 como "La revista más audaz para el lector más inteligente", fundada en 1941 por Miguel Mihura, como sucesora de la desaparecida revista La Ametralladora, fue objeto de varias leyendas urbanas referidas a algunas de sus supuestas portadas, que nunca existieron pero que la gente afirmaba haber visto (y hasta conservar el ejemplar correspondiente), leyendas que continuaron a pesar del desmentido de  Álvaro de Laiglesia en su último libro "La Codorniz sin jaula " .
¡Caramba, don Jerónimo! Está usted muy cambiado?’ ‘Es que no soy don Jerónimo’. ‘Pues más a mi favor” 
Ilustración de Tono para la portada del primer número de'La Codorniz', del 8 de junio de 1941

Algunas famosas portadas que nunca existieron:
1) La portada del túnel: La leyenda asegura que La Codorniz editó un número en cuya portada se veía la entrada de un túnel, por el que se disponía a penetrar la locomotora. Todas las páginas interiores estaban en negro, como si fuese la oscuridad del túnel. Y como contraportada, el tren saliendo del túnel. Ese número nunca existió.
2) La portada del fresco de Galicia: Otro dibujo que la gente afirma haber visto: Un parte meteorológico en el que en destacado recuadro podía leerse:Reina un fresco general procedente de Galicia, en clara alusión al general Franco, por entonces Jefe de Estado. Esa portada nunca apareció.
3) La portada del huevo de  Colón: Más célebre que las anteriores si cabe es, en el falso recuerdo popular, aquella que dicen que presentaba a toda página un gran huevo de gallina, con este rótulo: El huevo de Colón. Y luego, más abajo, en letra pequeña: La semana que viene publicaremos el otro. Un nuevo caso de atribución imaginativa. Esa portada tampoco existió.




4) La portada del se la tirará: Otro chiste que más de uno y más de dos, más de tres y más de cuatro, siguen jurando haber visto: un dibujo con un novio abrazando apasionadamente a su pareja. Un árbol con un pajarito. Un niño con una piedra en la mano a punto de arrojarla al pájaro. Y este pie de chiste: "¿Se la tirará o no se la tirará?". Cuarta portada que jamás existió.
5) Las de la Vespa y el título invertido: También la vox populi hablaba de la referida a la "moto verde" del "Marqués de Villavespa", sobre la exclusiva de importación de don Cristóbal Martínez Bordiú- Marqués de Villaverde, yerno de Franco, de los "scooters" italianos;y en segundo lugar, de aquella que cuando a Francis, el hijo varón de los marqueses de Villaverde, le cambiaron el orden de los apellidos llamándole Franco Martínez en vez de Martínez Franco, la mancheta de La Codorniz apareció como "Codorniz La". Ni la una ni la otra existieron.

6) La de bombín es a bombón: De todas las portadas-bulo, seguramente la más famosa fue la del enunciado de: "Bombín es a bombón, como cojín es a equis. Y nos importan tres equis que nos cierren la edición". A tal punto tuvo fuerza este camelo que dejaba en pésimo lugar a los que afirmaban poseer el número en cuestión .Esa portada no existió en La Codorniz.

Documentos RNE - La Codorniz, humor en tiempos difíciles






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